La preparación para el tratamiento de fertilidad, puede ser un momento emocionante y estresante a la vez.
Es emocionante embarcarse en el viaje de construir una familia, pero también puede ser un momento de incertidumbre, debido a las incógnitas inherentes sobre el resultado.
Por eso, a medida que comienza la preparación para el tratamiento de fertilidad, es importante estar preparado con la mente y el cuerpo.
Antes de comenzar el viaje de una fecundación “in vitro”, sería recomendable informarse y educarse en la preparación del cuerpo con esta serie de consejos.
En primer lugar, buscando formas saludables de aliviar el estrés, como hacer cosas cotidianas con la pareja y practicar alguna terapia como la risoterapia o cualquier otra que ayuden a eliminar las hormonas estresantes y mejoren el estado de ánimo.
En segundo lugar, mantener una dieta saludable, manteniendo el peso y evitando consumo de tabaco, alcohol y cafeína.
En tercer lugar, incorporar algún tipo de ejercicio cardiovascular en la rutina diaria. Las técnicas de relajación como el yoga y la acupuntura también son beneficiosas.
Por último, intentar concentrarnos en las cosas que se puedan controlar y dejar pasar las que se escapan a nuestro control, nos ayudará a mantenernos psicológica y emocionalmente mejor.
Hay que recordar, que parte del miedo y la ansiedad que conlleva un proceso de fecundación “in vitro”, proviene de la incertidumbre sobre el propio proceso y los posibles efectos secundarios del tratamiento.
Tengamos en cuenta, que todo el proceso puede ser, en algunos casos, un camino complejo, por tanto, no hay que temer nada a la hora de apoyarse en profesionales.
En cualquier caso, puedes ponerte en contacto con nosotros, sin compromiso, para disponer de información más detallada, de tu caso particular.